El diseñador de videojuegos Warren Robinett fue un pionero de su oficio. Conceptualizó y programó el innovador videojuego «Adventure» para Atari 2600. El juego fue un gran éxito comercial y vendió más de un millón de cartuchos. Pero «Adventure» hizo más que deleitar a los consumidores; Robinett escondía algo en el juego que alteró el panorama de los videojuegos para siempre.
